También sirven para vestirse diferente, sentirse rico y comer en un restaurante, ver a los amigos que los laborables no te dejan ver... aunque a mí me gustan los días laborables y me siento feliz de tenerlos; para muchos sólo hay días festivos y, paradojas de la vida, no tienen nada que celebrar...
Ese descanso de la vida ajetreada es un remanso de paz mezclado con nostalgia. A mí el domingo me llena de tristeza, aún no trabajando. Mi resaca descansa en los papeles que me acompañan en las manos.
5 comentarios:
¿Y quién nos libra de las resacas de los festivos en los laborales?
¡AY!
Beatriz
También sirven para vestirse diferente, sentirse rico y comer en un restaurante, ver a los amigos que los laborables no te dejan ver... aunque a mí me gustan los días laborables y me siento feliz de tenerlos; para muchos sólo hay días festivos y, paradojas de la vida, no tienen nada que celebrar...
Un abrazo de dia laborable para ti :)
http://www.youtube.com/watch?v=H6Bk7k4eApc
¿Y un buen vino con un buen libro de poemas?
Ese descanso de la vida ajetreada es un remanso de paz mezclado con nostalgia. A mí el domingo me llena de tristeza, aún no trabajando. Mi resaca descansa en los papeles que me acompañan en las manos.
Un abrazo Santiago.
De las resacas de los días laborables, Bea, creo que sólo nos libra el olvido.
Hola Karmen, me encanta tu capacidad para volver festivo todo lo laborable, o para trabajar sólo para la felicidad.
Un buen vino, unos buenos poemas y sobre todo unas buenas canciones de la gran Maria Bethania
Por suerte, los papeles, David, no le hacen caso a nuestros calendarios.
Una abrazo.
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