27 de agosto de 2009

Slow

Hacerlo todo más despacio. Yo también me apunto a esa moda. Hay que saber de antemano que estamos condenados a no llegar a ninguna parte. Pero ese destino hay que ir asumiéndolo sin gorigoris y sin grandes dramas. Vivir con la misma naturalidad que las flores o los pájaros.

5 comentarios:

Treinta Abriles dijo...

Ya he oído sobre esa moda o filosofía de vida, pero... ¿Viviendo en Madrid?
Yo ni lo intento...

Meiga dijo...

Respecto a lo de ir lento, pues ya somos dos. Hace ya tiempo que considero que es importante el cómo llegar que el hecho en sí de alcanzar un objetivo propuesto, sea del tipo que sea...

Te mando un abrazo sin prisas.

PD: Y gracias a tu blog acabo de descubrir una palabra curiosa: gorigori. No la conocía.

Editor dijo...

Siempre hay que intentarlo, Bea, pero reconozco, conociendo los ritmos de Madrid, que lo tengo yo un poco más fácil en los ritmos canarios.
Hola Karmen, lo de gorigori viene de la religión, si no me equivoco, y siempre me resultó una palabra muy eufónica y sugerente. Estoy contigo en que lo tenga que ser será, y no importa lo deprisa que se quiera ir. Respirando hondo y sin perder nunca la calma. Por lo menos hay que intentar mantener esos ritmos quedos y tranquilizadores.

Anónimo dijo...

Sabor, hermoso poema de Pablo Neruda, léanlo despacio!
"De falsas astrologías, de costumbres un tanto lúgubres,
vertidas en lo inacabable y siempre llevadas al lado,
he conservado una tendencia, un sabor solitario.
De conversaciones gastadas como usadas maderas,
con humildad de sillas, con palabras ocupadas
en servir como escalvos de voluntad secundaria,
teniendo esa consistencia de la leche, de las semanas muertas,
del aire encadenado sobre las ciudades.
¿Quién puede jactarse de paciencia más sólida?
La cordura me envuelve de piel compacta
de un color reunido como una culebra:
mis criaturas nacen de un largo rechazo:
ay! con un sólo alcohol puedo despedir este día,
que he elegido, igual entre los días terrestres.
Vivo lleno de una substancia de color común, silenciosa
como una vieja madre, una paciencia fija
como sombra de iglesia o reposo de huesos.
Voy lleno de esas aguas dispuestas profundamente
preparadas, durmiéndose en una atención triste.
En mi interior de guitarra hay un aire viejo,
seco y sonoro, permanecido, inmóvil,
como una nutrición fiel, como humo:
un elemento en descanso, un aceite vivo:
un pájaro de rigor cuida mi cabeza:
un ángel invariable vive en mi espada."

http://www.youtube.com/watch?v=AJ92IPMaG28

Editor dijo...

También yo apuesto por Neruda, y, por supuesto, por bailar toda la vida un slowly, o por lo menos tonight o de vez en cuando. Un abrazo.