Tú eres tu único juez y tu único culpable.
No te condenes por un error del pasado.
Tampoco vivas de los días de rosas
o de mendaces y patéticas nostalgias.
Todo queda ajado por el paso del tiempo.
Ni el éxtasis ni el desastre logran eternizarse.
Eres lo que quieras ser a partir de este instante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario