2 de noviembre de 2012

Contrarios


El beso y el insulto coinciden en un solo segundo,
y el disparo mortal y la caricia más apasionada,
y también el primer llanto y la última mirada.
Nunca hay un momento que no tenga su contrario.
También nosotros somos así de contradictorios,
eufóricos o aliquebrados, luminosos y opacos,
amaneciendo y atardeciendo cada minuto que pasa.

No hay comentarios: