4 de enero de 2013

Campanas


No recordabas el tañer de estas campanas.
Siguen repicando cuando llega la alegría,
golpeando quedamente cada hora que pasa,
entristeciendo la tarde si traen algún muerto.
No importa que hayas estado lejos muchos años.
Ellas te siguen recordando que cada vibración es eterna,
un eco interminable que acaba expandiendo tu propio universo,
un sonido lejano que a veces se acaba enturbiando de nostalgias,
el golpe monótono del tiempo que despierta a las palomas de la plaza.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Sr Gil
Simplemente quería desearle un Feliz Año y agradecerle sus relatos desde que le sigo que fue a través de Un texto conmovedor escrito el 4/01/2008 en el que despedía a un amigo suyo.
Gracias por tener este blog y ciclotimias, los cuales sigo bien me despierto leyendo sus historias o bien despido el día con ellas. Es increíble como describe los buenos o
malos detalles de la vida diaria, detalles que antes no
me percataba de ellos
Enhorabuena por su último libro
Saludos Cordiales
Gracias por

Editor dijo...

Muchas gracias por su lealtad lectora. Un gran abrazo