16 de mayo de 2013

Tarareos


La música que guardó alguna vez tus emociones
jamás deja de resonar en el eco lejano de los recuerdos.
La mayoría de las veces solo eres capaz de tararear las melodías,
pero te vale esa pista imprecisa, con acordes casi siempre equivocados,
para bailar a solas, dejándote llevar, en grandes salones con espejos
en los que se acaban confundiendo todos los ojos que te amaron.

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