Como cuando tenía seis,dieciséis o veintiséis años.La misma sensación de arrastrar un cuerpo derrotado.Treinta y siete y unas pocas décimas de temperatura. Una corriente de aire o tres gotas de lluvia intermitente bastan para tumbarnos.Tan poca cosa.Tan vulnerables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario